Esta entrada del Blog de Ojos se la voy a dedicar a Martín Martínez Serrano, nuestro flamante comandante de vuelo ilicitano. Martín es hijo de mis amigos Ana y Martín y está ejerciendo su maestría y vocación un poquito lejos, en Indonesia para una compañía que se llama Lion Air y cuyo lema es “Hacemos volar a la gente” (We make people fly).
Hace unas semanas movimos por redes sociales una foto espectacular de la cabina de vuelo de un Concorde y que reproducimos aquí también. Como vemos en esta foto y en la de Martín hay numerosos controles y relojes que están en el techo de la cabina, por lo que el comandante y el copiloto tiene que mirar hacia arriba, a una distancia variable, para ver y manipular botones, pantallas de datos, etc.
Martín es un mocetón que el próximo 2 de Abril cumplirá treinta años por lo que no tiene ninguna dificultad para ver bien a todas las distancias. Pero cumplirá años y cuando tenga 45 o algo más empezará con presbicia o vista cansada y notará que los dígitos de los paneles de control le costará verlos.
Pero ¿qué es la presbicia? El ojo, al igual que las cámaras de vídeo y fotografía con su sistema de «autofocus», dispone en su interior de una lente natural, el cristalino, que realiza de manera automática un enfoque de la visión para poder ver a cualquier distancia con nitidez. A partir de los 40-45 años de edad el automatismo empieza a fallar y las imágenes que tenemos que ver de cerca, como son la lectura o la costura, se hacen con dificultad.
El fallo de enfoque de la visión próxima va aumentando progresivamente hasta los 60 años de edad en que se estabiliza en un tope. Hasta entonces, cada dos o tres años hay que ir ajustando la graduación de cerca para un correcto enfoque. Es el defecto de graduación más frecuente que existe ya que de manera inexorable afecta a casi el 100% de la población al llegar a esas edades.
Cuando esto le suceda a Martín de entrada es posible que decida ponerse unas gafas con unos cristales progresivos para poder ver bien de lejos y en esa distancia medio próxima medio intermedia que precisa. Estas lentes tienen una zona central y superior para ver de lejos y dos áreas en la mitad de debajo para distancia intermedia y cercana.
Por tanto problema resuelto, ve de lejos el panorama, ve los controles de abajo bien… pero ¿y los de arriba?. ¡Ay! Empiezan los problemas. Las lentes progresivas llevan la zona de visión próxima e intermedia abajo. Hubo una época en que se fabricaron cristales llamados “Pilot” para solventar éso, con la visión intermedia-próxima también por arriba pero se dejaron de fabricar. Le tocara gimnasia de cuello o bien fichar de copiloto otro mocetón treintañero que controle las señales de la parte superior de la cabina.
Os dejamos un enlace interesante sobre problemas generales y visuales en pilotos y otro más técnico sobre requerimientos visuales en los pilotos, escrito por un oftalmólogo que trabajaba como tal en Iberia y con quien mantuve cierta vinculación, José Luis Rodríguez Villa.
Autor: Fernando Soler
• Oftalmólogo y Doctor en Medicina y Cirugía.
• Director de Innova Ocular Clínica Dr. Soler en Elche.
• Presidente de la Fundación Dr. Soler.
• Director de FacoElche.
• Ex – presidente del Grupo Innova Ocular
• Jefe de Servicio en excedencia del Hospital General Universitario de Elche.
0 comments for “El problema de la presbicia en los pilotos de vuelo”